La industria se paralizó ante el fallecimiento de Lee Kun-hee, el hombre más rico de Corea del Sur y presidente del grupo Samsung, uno de los conglomerados empresariales más importantes del mundo. La noticia la dio a conocer la compañía a través de un comunicado de prensa, en el que indican que el magnate murió "acompañado por su familia".
El que fuera líder de Samsung se encontraba hospitalizado en Seúl desde 2014 luego de sufrir un ataque cardíaco que lo dejó incapacitado. A finales de la década de 1990, Lee Kun-hee había recibido tratamiento médico por cáncer de pulmón.
Lee Kun-hee nació el 9 de enero de 1943. Fue el tercer hijo del empresario Lee Byung-chul, fundador de Samsung, empresa que pasó de ser un mero productor de electrodomésticos a uno de los fabricantes más importantes de televisores, smartphones, biotecnología, entre otros. En 2014, Lee Kun-hee ocupó el puesto número 35 de la Lista de las personas más poderosas del mundo de la revista Forbes, año en el que también fue nombrado el coreano más influyente a nivel internacional. El magnate estuvo al frente de Samsung por poco más de tres décadas, periodo en el que la compañía se convirtió en un referente de la industria electrónica y tecnológica. Actualmente, la firma global es la principal productora de televisores y chips de memoria en todo el mundo.
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