La junta de la tecnológica Indra ha refrendado a José Vicente de los Mozos como nuevo consejero delegado del grupo con el 88,98% del voto así como los nombramientos de los dos nuevos vocales independientes y del vocal en representación del accionista Amber.
La junta de accionistas de la tecnológica Indra ha refrendado el nombramiento de José Vicente de los Mozos como consejero delegado del grupo con casi el 89% del voto. También ha aprobado el nombramiento de dos nuevas consejeras independientes: María Ángeles Santamaría, ex CEO de Iberdrola España y Elena García Armada, fundadora y presidenta de Marsi Bionics, una firma tecnológica que produce exoesqueletos, ambas con un porcentaje del 99,99%. Además, también ha aprobado el nombramiento de Pablo Jiménez de Parga, el secretario del consejo de Prisa, como vocal en representación de Amber, con el 88,49% del voto. Para aprobar estos nombramientos, el grupo ha tenido que elevar de 14 a 16 el número de vocales para poder acomodar al consejero de Amber y, al mismo tiempo, mantener el equilibrio por el que los vocales independientes sigan siendo el 50% del consejo como insistió la CNMV. Esta medida ha contado con el 95,96% del voto presente o representado. En cambio, todos los puntos relacionados con las políticas de retribuciones de consejeros y directivos han recibido un apoyo mucho menor, de entre el 57,3% y el 62,9%, aunque es principalmente debido a la abstención de Sepi, el holding estatal dependiente de Hacienda, que es el primer accionista de Indra con alrededor de un 28%, que señala que "por política general se abstiene en todas las Juntas Generales de las sociedades cotizadas en las que participa en aquellos puntos relativos a remuneraciones de consejeros y directivos". La junta ha contado con una participación del 76,17% del capital, de que el 37,34% estaba en representado por el consejo de administración.
Cambios para mejorar
El nuevo consejero delegado ha señalado que Indra tiene la capacidad para "traccionar el ecosistema de defensa y tecnológico nacional como el actor prime, desde una perspectiva de proyecto-país, y con una aproximación colaborativa con toda la cadena de valor. España dispone de un tejido tecnológico industrial notable, pero cuyas capacidades hoy están fragmentadas y resultan subescalares respecto a Europa. Indra debe liderar su integración a través de diferentes mecanismos, no sólo la adquisición sino buscando acuerdos tecnológicos con diferentes empresas." De los Mozos también señaló que se debe adaptar "la estructura de la compañía" y la "simplificación de la operaciones internas" para dar respuesta a las necesidades de los clientes "en una forma más ágil en calidad, coste y plazo". También señaló que la compañía debe "invertir más en tecnología, de una forma sostenible" y "aunque somos una referencia en algunos de los productos, no es suficiente, la tecnología avanza cada vez más rápido y en los últimos años no hemos sabido mantener ese ritmo. Debemos definir y ejecutar un road map a largo plazo, invirtiendo y capturando capacidades externas que den respuestas a las necesidades de nuestros clientes". Y para ello, el nuevo CEO ha señalado una serie de acciones a corto plazo: su designación como director ejecutivo del programa FCAS por la dimensión y el efecto transformador para el resto de la compañía". Y también ha anunciado que "en las próximas semanas" se va a lanzar "un comité de dirección estructurado en torno a los negocios con responsabilidad end to end sobre la cuenta de resultados, donde Minsait va a seguir preservando su autonomía en la gestión". De los Mozos también ha señalado que la firma preparará "un nuevo plan estratégico 2024-2026 con visión hasta 2030, que debe definir y alinear la nueva hoja de ruta de la empresa: necesitamos hacer nuestra evolución hacia el futuro".
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